Hay en el término de Orcera en un sitio llamado Valdemarín
un trozo de tierra que se conoce con el nombre de “Cañada del Moro.”
A mí me gusta saber, por qué se pone un nombre determinado a
las cosas, y un día pregunté por qué ese sitio se llamaba “Cañada del Moro.” y
un señor me contó esta historia.
España estaba en guerra. Los reyes querían que los árabes se
fueran de nuestra tierra porque se estaban apoderando demasiado de ella. En un
combate hirieron al rey y como lo más cercano que había del lugar de la
batalla, era la casa de un moro que vivía por allí cerca, llevaron al rey a esa
casa. El moro lo recibió muy bien y lo atendió y cuidó hasta su completa recuperación. Se fue el rey y la
guerra siguió. Hasta que un día todos los moros tenían que marcharse a su
tierra.
Pero el rey no olvidó
lo bien que se había portado aquel hombre con él cuando lo necesitó. Entonces
ordenó a su secretario que fuera a aquel lugar y no solo que no expulsara al
moro, si no que le dejara la casa y la
tierra que había a su alrededor y su nacionalidad de español para toda su vida.
El moro se sitió muy agradecido, y dio las gracias y le dijo que se sentía muy
contento y orgulloso de ser súbdito de un rey tan justo y generoso. Y
vivió en ese lugar hasta el fin de sus días.
Por eso esa tierra se
llama “La Cañada del Moro.”
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